Villa Allende: inquietud por una reserva natural
Una minera compró predios en un área protegida. Dice que no será para canteras. Vecinos y sectores ambientalistas reclaman que se precisen y se apliquen normas de protección.
Villa Allende cuenta, en su jurisdicción, con un área declarada desde 2002 como “reserva hídrica, recreativa y natural”. Se trata de unas 7.800 hectáreas serranas, con propietarios privados, pero que por ley y ordenanzas locales no debieran poder cambiar de uso de suelos. Por ejemplo, para darles nuevos fines industriales, mineros o de desarrollos inmobiliarios.
En los últimos días se generó una discusión, ante la confirmación de que una empresa minera, con una cantera ya en marcha en Villa Allende, había adquirido 40 hectáreas dentro de esa reserva.
Vecinos y organizaciones anticiparon su inquietud por la posible expansión de la minería a esa área. En la noche del jueves pasado, unas 120 personas se reunieron en el ámbito de la Comisión de Ambiente, creada por la Carta Orgánica local.
Antes, el municipio había emitido un comunicado en el que aclaró que la empresa El Gran Ombú lo había notificado de la compra de una superficie dentro de la reserva, pero que aseguró su intención de “preservarla como parte de un plan de recuperación ambiental, social y cultural, y no para explotarla en ninguna instancia”.
Los predios adquiridos por esa empresa involucran las zonas conocidas como Estancia La Reducción y La Tranquerita. Según el municipio, la empresa le anunció su intención de destinarlas sólo a uso recreativo, incluyendo la creación de una laguna de retención que “ayudaría a evitar inundaciones en la ciudad”.
Además, el municipio recordó que hay ordenanzas y leyes provinciales que impedirían otro uso.
Los vecinos movilizados sostienen su inquietud y reclaman que el municipio reglamente la ordenanza que creó esa reserva. “En Villa Allende, como en La Calera, se crearon reservas municipales, pero nunca las reglamentaron. Esa materia pendiente genera luego confusiones, que hay que evitar”, aportó Federico Kopta, del Foro Ambiental Córdoba, que apoya la preocupación vecinal.
Sectores ambientalistas marcan que en la comunicación del municipio se confunden las leyes vigentes y advierten que hace dos meses se suspendió una audiencia pública por otra cantera (Puesto de Funes), en esa misma zona. Plantean que tal proyecto no debiera haber llegado a esa instancia si el municipio le hubiera quitado aval.
También marcan que en bordes del área de reserva ya hubo avances de emprendimientos que no debieran estar autorizados y reclaman “una aplicación efectiva” del criterio de reserva natural.
Fuente: La Voz del Interior